La inteligencia artificial está dando a las máquinas el poder de generar vídeos, escribir códigos informáticos e incluso mantener una conversación.
También está acelerando los esfuerzos para comprender el cuerpo humano y combatir las enfermedades.
El miércoles, Google DeepMind, el principal laboratorio de inteligencia artificial del gigante tecnológico, e Isomorphic Labs, una empresa hermana, dieron a conocer una versión más poderosa de AlphaFold, una tecnología de inteligencia artificial que ayuda a los científicos a comprender el comportamiento de los mecanismos microscópicos que impulsan las células en el planeta. Cuerpo humano.
Una primera versión de AlphaFold, lanzada en 2020, resolvió un enigma que había atormentado a los científicos durante más de 50 años. Se le llamó «el problema del plegamiento de proteínas».
Las proteínas son las moléculas microscópicas que guían el comportamiento de todos los seres vivos. Estas moléculas comienzan como cadenas de compuestos químicos antes de retorcerse y doblarse en formas tridimensionales que definen cómo interactúan con otros mecanismos microscópicos del cuerpo.
Los biólogos han pasado años o incluso décadas intentando determinar con precisión la forma de las proteínas individuales. Luego vino AlphaFold. Cuando un científico alimentó esta tecnología con una serie de aminoácidos que forman una proteína, pudo predecir su forma tridimensional en cuestión de minutos.
Cuando DeepMind lanzó públicamente AlphaFold un año después, los biólogos comenzaron a utilizarlo para acelerar el descubrimiento de fármacos. Investigadores de la Universidad de California en San Francisco han utilizado la tecnología mientras trabajaban para comprender el coronavirus y prepararse para pandemias similares. Otros lo utilizaron mientras luchaban por encontrar remedios para la malaria y la enfermedad de Parkinson.
La esperanza es que este tipo de tecnología simplifique significativamente la creación de nuevos medicamentos y vacunas.
«Nos dice mucho más sobre cómo interactúan las máquinas en la célula», dijo el investigador de Google DeepMind, John Jumper. «Nos dice cómo debería funcionar y qué sucede cuando nos enfermamos».
La nueva versión de AlphaFold, AlphaFold3, extiende la tecnología más allá del plegamiento de proteínas. Además de predecir la forma de las proteínas, puede predecir el comportamiento de otros mecanismos biológicos microscópicos, incluido el ADN, donde el cuerpo almacena información genética, y el ARN, que transfiere información del ADN a las proteínas.
“La biología es un sistema dinámico. Es necesario comprender las interacciones entre diferentes moléculas y estructuras”, afirmó Demis Hassabis, director ejecutivo de Google DeepMind y fundador de Isomorphic Labs, también propiedad de Google. “Este es un paso en esa dirección”.
La empresa ofrece un sitio web donde los científicos pueden utilizar AlphaFold3. Otros laboratorios, en particular la Universidad de Washington, ofrecen tecnología similar. En un artículo publicado el martes en la revista científica Nature, el Dr. Jumper y sus colegas investigadores demuestran que alcanza un nivel de precisión mucho más allá del estado de la técnica.
La tecnología podría “ahorrar meses de trabajo experimental y permitir investigaciones que antes eran imposibles”, dijo Deniz Kavi, cofundador y director ejecutivo de Tamarind Bio, una nueva empresa que desarrolla tecnología para acelerar el descubrimiento de fármacos. «Esto representa una tremenda promesa».